La palabra Reconocer tiene un significado muy interesante, cuando la aplicamos a nuestra vida cristiana al reconocer a Jesús nos ponemos en una posición muy especial que nos hace recibir muchas bendiciones, en esta nota veremos algunas de ellas.

¿Qué es Reconocer?

El diccionario de la Real Académica de la lengua Española (RAE) nos da varios significados, el que encuentro muy interesante para este pequeño estudio es el siguiente:

Reconocer: Examinar algo o a alguien para conocer su identidad, naturaleza y circunstancias.

En base a esto y aplicado a nuestra vida cristiana podemos decir que reconocer a Jesús involucraría lo siguiente:

• Conocer su Identidad – Que el es Hijo de Dios.
• Conocer su Naturaleza – Que el es el Cristo, el ungido, el es santo.
• Conocer sus Circunstancias – Que el es Todopoderoso, nada es imposible para Él.

En base a esto veremos como la Biblia nos muestra las bendiciones que recibimos la reconocer a Jesús.

1. Bendición de la Salvación.

Juan 3:16 Reina-Valera 1960 (RVR1960)

De tal manera amó Dios al mundo
16 Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.

En esta escritura podemos entender que el creer que Jesús es el Hijo de Dios (Identidad) nos hace ganar la vida eterna, esto es tener acceso al cielo y a una vida celestial aquí en la tierra. Así lo confirma la siguiente escritura:

Romanos 6:23 Nueva Versión Internacional (NVI)

23 Porque la paga del pecado es muerte, mientras que la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús, nuestro Señor.

2. Cielos Abiertos.

Juan 1:48-51 Reina-Valera 1960 (RVR1960)

48 Le dijo Natanael: ¿De dónde me conoces? Respondió Jesús y le dijo: Antes que Felipe te llamara, cuando estabas debajo de la higuera, te vi. 49 Respondió Natanael y le dijo: Rabí, tú eres el Hijo de Dios; tú eres el Rey de Israel. 50 Respondió Jesús y le dijo: ¿Porque te dije: Te vi debajo de la higuera, crees? Cosas mayores que estas verás. 51 Y le dijo: De cierto, de cierto os digo: De aquí adelante veréis el cielo abierto, y a los ángeles de Dios que suben y descienden sobre el Hijo del Hombre.

En esta escritura podemos ver como Natanael reconoce a Jesús al decirle  «tú eres el Hijo de Dios; tú eres el Rey de Israel», en resumen Jesús le contesta lo siguientes:

• Cosas mayores que estas verás.
• Verás el cielo abierto.
• Verás ángeles de Dios que suben y bajan sobre el Hijo del Hombre.

Cuando nosotros reconocemos a Jesús como lo hizo Natanael veremos milagros y las oraciones que hagamos en el nombre de Jesús estarán siendo contestadas, a eso se refiere cuando habla de los ángeles que suben (Oraciones) y ángeles que bajan (respuestas de Dios).

3. Las llaves del Reino (autoridad).

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Mateo 16:15-19 Reina-Valera 1960 (RVR1960)

15 El les dijo: Y vosotros, ¿quién decís que soy yo? 16 Respondiendo Simón Pedro, dijo: Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente. 17 Entonces le respondió Jesús: Bienaventurado eres, Simón, hijo de Jonás, porque no te lo reveló carne ni sangre, sino mi Padre que está en los cielos. 18 Y yo también te digo, que tú eres Pedro, y sobre esta roca edificaré mi iglesia; y las puertas del Hades no prevalecerán contra ella. 19 Y a ti te daré las llaves del reino de los cielos; y todo lo que atares en la tierra será atado en los cielos; y todo lo que desatares en la tierra será desatado en los cielos.

En esta escritura vemos como Pedro reconoció a Jesús diciéndole «Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente« y Jesús le entrega las siguientes bendiciones.

• Bienaventurado (Dichoso, bendecido).
• Revelación del Padre.
• Te daré las llaves del reino para atar y desatar (autoridad).

El Señor Jesús le da una autoridad muy importante a Pedro porque le da la oportunidad de que través de sus palabras el pueda prohibir lo malo y permitir lo bueno. Las palabras atar y desatar se refieren a prohibir y permitir.

El Señor Jesús le entrega a Pedro una autoridad muy poderosa solo por reconocerlo.

4. Abrir sentidos espirituales y una pasión por Jesús.

Lucas 24:29-35 Reina-Valera 1960 (RVR1960)

29 Mas ellos le obligaron a quedarse, diciendo: Quédate con nosotros, porque se hace tarde, y el día ya ha declinado. Entró, pues, a quedarse con ellos. 30 Y aconteció que estando sentado con ellos a la mesa, tomó el pan y lo bendijo, lo partió, y les dio. 31 Entonces les fueron abiertos los ojos, y le reconocieron; mas él se desapareció de su vista. 32 Y se decían el uno al otro: ¿No ardía nuestro corazón en nosotros, mientras nos hablaba en el camino, y cuando nos abría las Escrituras? 33 Y levantándose en la misma hora, volvieron a Jerusalén, y hallaron a los once reunidos, y a los que estaban con ellos, 34 que decían: Ha resucitado el Señor verdaderamente, y ha aparecido a Simón. 35 Entonces ellos contaban las cosas que les habían acontecido en el camino, y cómo le habían reconocido al partir el pan.

Esta escritura es un fragmento del pasaje «El camino a Emaus» que nos narra el capítulo 24 del evangelio según San Lucas, para poder entender esta escritura veremos el contexto de estos acontecimientos.

• Jesús fue crucificado.
• Jesús resucito.
• Dos discípulos se entristecen por este hecho.
• Estos dos discípulos de Jesús se apartan del grupo y se van por el camino a Emaus.
• Jesús resucitado los alcanza en el camino pero ellos no lo reconocen.

Es muy recomendable leer todo el pasaje para tener mayor claridad de lo que vamos a comentar.

En la escritura anterior dice que Jesús se sentó con ellos  a cenar, entonces Jesús bendijo el pan y  lo partió, es en ese momento en que les fueron abiertos sus ojos y le reconocieron.

Eso es lo que esta pasando hoy en tu vida que tus ojos están siendo abiertos de parte del Señor para que lo reconozcas y el te bendiga en abundancia.

Necesitamos que el Señor abra nuestros ojos (sentidos espirituales) para poder reconocerle, así como estos discípulos que pasaron de la tristeza y la desesperanza a tener una pasión por Jesús, esto lo demuestran los discípulos al decir «¿No ardía nuestro corazón en nosotros, mientras nos hablaba en el camino, y cuando nos abría las Escrituras?». lo interesante es que cuando reconocen a Jesús se levantan y vuelven a reunirse con el grupo.

Reconocer a Jesús quita la tristeza y la decepción en nosotros.

Hay algo muy interesante en esta escritura que los discípulos dicen después de reconocer a Jesús «Ha resucitado el Señor verdaderamente», como vimos la principio esto es conocer la circunstancias de Jesús, y hay algo que más que estos discípulos sentían en su corazón al reconocer que Jesús había resucitado, «En verdad el es Todopoderoso». 

En otras palabras reconocer a Jesús hace crecer nuestra fe.

Y la escritura dice que para el que cree nada le es imposible (Marcos 9:23).

5. Corona de favores y misericordias, victorias.

Apocalipsis 4:8-11 Reina-Valera 1960 (RVR1960)

8 Y los cuatro seres vivientes tenían cada uno seis alas, y alrededor y por dentro estaban llenos de ojos; y no cesaban día y noche de decir: Santo, santo, santo es el Señor Dios Todopoderoso, el que era, el que es, y el que ha de venir. 9 Y siempre que aquellos seres vivientes dan gloria y honra y acción de gracias al que está sentado en el trono, al que vive por los siglos de los siglos, 10 los veinticuatro ancianos se postran delante del que está sentado en el trono, y adoran al que vive por los siglos de los siglos, y echan sus coronas delante del trono, diciendo: 11 Señor, digno eres de recibir la gloria y la honra y el poder; porque tú creaste todas las cosas, y por tu voluntad existen y fueron creadas.

En esta escritura el apóstol Juan relata la adoración en los cielos, y vemos que reconocen al Padre al decir Santo, santo, santo es el Señor Dios Todopoderoso,  la adoración es otra manera de reconocer al Señor.

También nos dice que los seres vivientes reconocen al Señor dandole:

• Gloria.
• Honra.
• Acción de gracias.

En otras palabras lo están reconociendo, así como lo hacen los 24 ancianos que se postran delante de Él y le arrojan sus coronas.

Las coronas representan victorias.

La Biblia nos dice lo siguiente:

Salmos 103:2-4 Reina-Valera 1960 (RVR1960)

2 Bendice, alma mía, a Jehová,
Y no olvides ninguno de sus beneficios.
3 El es quien perdona todas tus iniquidades,
El que sana todas tus dolencias;
4 El que rescata del hoyo tu vida,
El que te corona de favores y misericordias;

El Señor nos corona de favores y misericordias, en otras palabras nos da victorias. Por eso los ancianos al adorarle arrojando sus coronas están reconociendo de donde vienen estas  bendiciones, la adoración al Señor es una manera de reconocer que las victorias de nuestras vidas el nos las ha dado.

Para cerrar esta nota queremos compartirte una alabanza de Sarah Galindo, líder de alabanza en Comunidad Cristiana de México, en la ciudad de Saltillo. Esta alabanza llamada «lléname» nos ayudará a reconocer al Señor, uno de los coros dice lo siguiente:

Tu eres el Rey, tu eres Señor,

Jesucristo,

Tu abres los cielos,

Tu autoridad (las llaves)
quita la oscuridad (maldad)

y tu Reino se mueve aquí (Bendición de Dios)

Hemos puesto el video de la alabanza justo en el momento en que Sarah declara este coro, creemos que resume lo que hemos compartido en esta nota, así que esto nos ayudará a reconocer al Señor.

Mi deseo es que seas bendecido a través de este pequeño estudio.